Tomate de árbol, autóctono de la zona andina

Fotografía catalunyaplants.com

Todavía recuerdo la sensación de ese sabor nuevo. Mi primer jugo de tomate de árbol fue un total y maravilloso descubrimiento que a día de hoy aún no puedo sacarlo de mi paladar y es raro la mañana que no lo tomo en el desayuno acompañando cualquier pan de dulce y un rico café.

Se cree que es originario del norte de Chile, según las primeras descripciones históricas, y se cultiva en la mayoría de franja andina desde Chile hasta Colombia, por eso también se le conoce como tomate andino entre los varios nombres en diferentes países (tomate de yuca, tamarillo, chilto o sachatomate).

En Ecuador tiene dos utilizaciones primordiales sobre todo, una como el susodicho jugo, previamente cocido el tomate junto con su piel y cernido (colado), o bien como ingrediente de una de las salsas mas tradicionales en las mesas ecuatorianas; la salsa de ají con tomate de árbol, de la que escribimos un post no hace mucho tiempo.

Pero también está considerado como un complemento alimenticio y una rica fuente de vitaminas. El fruto tiene un sabor agridulce debido a su alta concentración de ácido cítrico y posee macronutrientes como el potasio, fósforo y magnesio. También tiene un alto contenido de hierro y el zinc por lo que tiene la capacidad de prevenir enfermedades por mala nutrición. Contiene calorías, agua, proteínas, tiamina, riboflavina, niacina, caroteno, vitaminas A, B, E, y C, etc. Incluso, contiene vitamina F, empleada en el tratamiento de las enfermedades térmicas, en especial sobre las cicatrices.

Los usos medicinales que se le dan en Ecuador están relacionados con las afecciones de garganta y gripe. El fruto o las hojas, previamente calentadas, se aplican en forma tópica contra la inflamación de amígdalas o anginas especialmente. Para la gripe se debe consumir el fruto fresco en ayunas. Igualmente contribuye a curar migrañas y cefaleas severas, controla la rinitis, baja el nivel de colesterol en la sangre y beneficia el sistema circulatorio.

Pues todos estos beneficios se complementan con un sabor que me fascina, por lo tanto creo que seguiré tomándolo cada vez que tenga oportunidad y vosotros deberíais hacer los mismo.

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Ecuador del Sur

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