Fechas de grandes "chuchaquis"




En Ecuador la palabra "chuchaqui" expresa el malestar que se siente luego de una borrachera. Lo que en otros países se conoce como resaca, cruda, goma, "caña mala" o guayabo.
Proviene del termino quichua "chaqui", que significa malestar que queda luego de masticar hojas de coca.

Algunos estudios revelan que el chuchaqui es debido a los procesos metabólicos del hígado, los efectos diuréticos del alcohol y la disminución del azúcar en la sangre.

El chuchaqui se caracteriza por dolor de cabeza, fatiga, sed intensa, ardor de estómago, malestar general, visión borrosa, acidez estomacal, temblores, diarrea, mareos, náuseas y puede llegar hasta el vómito. El paciente con chuchaqui tiene una disminución del rendimiento laboral, de la capacidad cognitiva y de las habilidades visuales-espaciales.

El dolor de cabeza, común en todas las personas que sufren chuchaqui, resulta de la dilatación de los vasos sanguíneos, de la disminución de glucosa en la sangre y del efecto que producen algunas sustancias vasodilatadoras (tiamina e histamina) en el organismo, así como por la deshidratación.




En general se puede decir que los síntomas de el chuchaqui son causados por deshidratación, alteraciones hormonales, desregulación de las vías de metabolización de las citoquinas y efectos tóxicos directos.

Para prevenir la deshidratación se debe consumir gran cantidad de agua. No es recomendable forzar al estómago. Lo mejor al día siguiente de haber tomado en exceso es comer platos suaves, como arroz, pescado hervido o consomé, muy indicados para reponer las sales y el potasio que se han reducido por el consumo de alcohol. Descansar es fundamental para remediar el chuchaqui. Pasear al aire libre ayuda a combatir los mareos. Normalmente su efecto desaparece en las 24 horas siguientes al consumo de las bebidas.



DONACIONES
Ecuador del Sur




Barcelona-Emelec, la gran rivalidad del fútbol ecuatoriano

En Catacocha los Maristas son los guardianes del agua




Fotografía Juan Carlos Valarezo (Nci)
Los cerca de 170 chicos del ecoclub del colegio Marista enseñaron a 850 familias la importancia de proteger las fuentes de agua.

A mediados de la semana anterior, ante el Arq. Ramiro Maita, alcalde del cantón Paltas; el Director de Gestión Ambiental del Municipio; una representante de ese Distrito Educativo, y técnicos de Naturaleza y Cultura, 86 estudiantes del Campo de Acción de Participación, de la Unidad Educativa Fiscomisional Marista de Catacocha, secundados por el Ing. Hólger Pogo, su coordinador, presentaron, a través de un vídeo y una exposición verbal, un informe sobre los resultados obtenidos en la campaña de educación ambiental que vienen apoyando en Catacocha, en el que se destacó la recolección de botellas plásticas y cartón, la reforestación de la Reserva Pisaca y la capacitación a la población sobre buenas prácticas del uso del agua y su conservación.




Dicha campaña ha sido posible gracias al Convenio de Cooperación Interinstitucional firmado por el Gobierno Autónomo Descentralizado (GAD) Municipal de Paltas, la Unidad Educativa Marista y Naturaleza y Cultural, cuyo objeto es, por una parte, continuar el proceso de conservación y restauración de los ecosistemas de la Reserva Pisaca y las principales microcuencas abastecedoras de agua de Catacocha y otras poblaciones aledañas, y por otra, prolongar en Catacocha la campaña de educación ambiental (financiada por el Gobierno Flamenco de Bélgica, mediante la fundación BOS+), orientada a motivar cambios de comportamiento en la comunidad local a favor de la conservación de los recursos naturales.

De esta manera, los aproximadamente 170 estudiantes que conforman el campo de acción de Participación de ese colegio –ecoclub del colegio Marista- recolectaron en el 2013, con la ayuda de la comunidad, 239 533 botellas (equivalentes a 5 370 kg), con cuya venta se financió la adquisición de equipos audiovisuales (proyectores de vídeo), computadoras, grabadoras e instrumentos para la orquesta del colegio (percusión). Este año, han recogido cuatro toneladas de botellas plásticas.

Por otra parte, los chicos han sembrado unos 16 000 arbolitos de varias especies nativas –principalmente, vainillo-, a través de mingas ecológicas en las que también han participado los padres de familia y los profesores del colegio.

Finalmente, llevaron adelante el Programa de Buenas Prácticas de Uso del Agua y su Conservación, para lo cual se capacitaron sobre la importancia de proteger las fuentes de agua y de usar correctamente el líquido vital, y replicaron dichos conocimientos a 850 familias de Catacocha –cinco familias por cada estudiante-, con la ayuda de una cartilla didáctica elaborada para tal efecto, que aborda varios temas -potabilización, buen uso del agua en el hogar, contaminación del líquido vital y sus efectos en la salud, etc.
Al final del informe en cuestión, el Alcalde de Paltas se comprometió a continuar apoyando la labor de los chicos del ecoclub del colegio Marista, y añadió que gracias a la reforestación llevada a cabo en el cerro Pisaca, fuente de agua de Catacocha, se ha podido incrementar el número de horas de dotación de agua a dicha ciudad.

Seguidamente, cuatro actores del colegio Marista expresan en esta nota sus puntos de vista sobre esta experiencia, que también se ha replicado en otros seis GAD municipales (Celica, Macará y Puyango –Loja-; Centinela del Cóndor y Palanda -Zamora Chinchipe-, y Zaruma -El Oro-), y cuyo impacto en la población aún está pendiente de evaluar.

Fuente: NCI Ecuador






DONACIONES
Ecuador del Sur




Iglesia convertida en pinacoteca en Catacocha

El Pase del Niño Viajero en Cuenca




El Pase del Niño viajero se realiza el 24 de diciembre, evento que reúne a una gran cantidad de niños y jóvenes que desfilan vestidos con ropajes típicos de la época: mayorales, pastores, cholos, saragureños, ángeles, etc.

Este pase recorre desde la iglesia del Corazón de Jesús hasta San Blas. Los personajes principales son los mayorales montados en caballos adornados con todos los detalles de comida y bebida, incluyendo frutas, que luego se reparten entre todos los participantes.

Es una tradición muy antigua en la que se brinda un culto especial a la figura del nacimiento de Cristo, el “Niño Dios”. La procesión se la realiza cargando la figura del Niño. Los niños pequeños que caminan disfrazados de ángeles y pastores, van acompañados de la banda del pueblo que toca los villancicos populares.

La procesión culmina en la Catedral de la Inmaculada en donde se celebra la misa. Los pases del niño se celebran en la ciudad de Cuenca a partir del primer domingo de Advenimiento, hasta los días de carnaval. Existen dos tipos de pases: los denominados “Pases Mayores” que son el celebrado el 24 de Diciembre, el primero de enero y el Pase del Niño Rey el 5 de enero. Y los denominados “Pases Menores”, en los cuales la participación de la población es menor.




Dentro de los pases del Niño, existen los priostes que son las personas que auspician social y económicamente las fiestas religiosas, sus tareas son las de organizar el Pase, realizar las invitaciones y cubrir los gastos económicos.


La Yuca, mi nuevo complemento en las comidas



Para los que leéis esta nota en América os preguntaréis que tan necesario es un post explicando lo que es la yuca, pero en Europa esta raíz apenas se empieza a conocer actualmente gracias a la migración. Os puedo asegurar que jamás comí yuca antes de llegar a vivir a Ecuador.

Está constituida por un arbusto de características leñosas, pudiendo alcanzar una altura de 4-5 metros dependiendo del cultivar. Posee tallos ramificados y las hojas son lobuladas, palmadas y de color que varía del verde al rojizo. Es originario de América y está muy poco extendido por otras zonas, salvando la parte central de África.

Las raíces son tuberosas variando en número de acuerdo con el cultivar y generalmente presentan un crecimiento en dirección oblicua. Miden de 20-40 cm de longitud y 5-20 cm de diámetro. El color externo es café y el interno puede ser rosado, blanco, o crema amarillo. La profundidad del sistema radicular alcanza hasta los 2 m ocupando las raíces reservorias los primeros 50 cm. empleada en Sudamérica desde mucho antes de la colonia, como parte importante en la alimentación de las tribus, se cree que es originaria de Brasil. Es una raíz de forma elongada cubierta por una cáscara áspera de color rosado/café; su densa y fibrosa pulpa es de color blanco.




La yuca es un cultivo perenne con alta producción de raíces reservantes, como fuente de carbohidratos y follajes para la elaboración de harinas con alto porcentaje de proteínas. Las características de este cultivo permiten su total utilización, el tallo (estacón) para su propagación vegetativa, sus hojas para producir harinas y las raíces reservantes para el consumo en fresco o la agroindustria o la exportación.

Recientes investigaciones tienden a demostrar que el complemento alimentario de los mayas, el que les permitió sostener poblaciones muy numerosas, sobre todo durante el periodo clásico, y muy particularmente en la región sur de Mesoamérica en donde se concentraron importantes multitudes (Tikal,Copán, Calakmul), fue la Manioca, también llamada Yuca, una raíz con alto contenido calórico del que se prepara una harina muy nutritiva, en forma de torta redonda, llamada "casabe", que hasta la fecha es parte importante de la dieta en las diversas poblaciones que viven en la región maya y también en la cuenca del Mar Caribe, en especial en la República Dominicana y Venezuela.



DONACIONES
Ecuador del Sur




SI VES INTERESANTE EL POST NO DUDES EN COMPARTIRLO EN TUS REDES SOCIALES

Carretillero de mi vida

Las celebraciones ancestrales de Navidad en Saraguro




La Navidad tiene una importancia especial en la provincia de Loja (Sierra sur de Ecuador), sobre todo en el área ocupada mayoritariamente por el pueblo Saraguro, uno de los cinco grupos étnicos ecuatorianos de habla quechua. Se trata de una fusión entre la fiesta del calendario cristiano y el antiguo Cápac Raymi (Qhapaq Raymi) andino, la celebración del solsticio de verano austral que, en tiempos del Tawantinsuyu, incluía determinados rituales y que aún hoy suele coincidir con el periodo de siembra del maíz.

La Navidad de los Saraguro se caracteriza por la procesión de la figura del Niño Jesús de la iglesia parroquial a la casa del organizador de la fiesta (el marcantaita) y de allí de vuelta al templo; tal procesión se ve aderezada por el desfile de característicos personajes disfrazados. Todo ello se suma a las copiosas comidas y a los bailes con que la organización del festejo agasaja a todos sus vecinos y visitantes.

Las actividades son coordinadas por el párroco y por el síndico, una persona muy respetada dentro de la comunidad. El síndico es el que elegía (hoy lo hace el párroco directamente) y el que guía al marcantaita, un personaje de buena posición económica, que asume todos los gastos y las responsabilidades de la organización (su esposa pasa automáticamente a ser marcanmama). Éste aprovechará todos los recursos a su alcance, incluyendo los tradicionales sistemas andinos de retribución de obsequios y favores que permiten a una persona disponer de una red (a veces, bastante importante) de personas dispuestas o comprometidas a ayudarla.

El marcantaita se entera de su designación con un año de antelación, de boca del párroco y durante la Misa del Gallo: tendrá el enorme honor de "amarcar" al Niño Jesús, tenerlo en su casa. Una de las primeras acciones del marcantaita es elegir a los seis guioneros o guiadores que lo ayudarán a lo largo de todo el proceso, así como al músico principal o primero (un violinista) y al segundo que lo acompañe al bombo.

El músico principal, a su vez, elige a los huahuas o juguetes, los bailarines disfrazados que protagonizarán los desfiles, y ensaya con ellos, enseñándoles los pasos y las coreografías. Tres semanas antes de Navidad, el marcantaita y sus guiadores realizan el chaquiricuna (del quechua chaki rikuna, "ver los pies"): visitan la casa del músico con algunas obligaciones (obsequios) para presenciar los ensayos. Días antes de la fiesta, son el músico y los juguetes los que visitan la casa del marcantaita para ser nuevamente obsequiados y mostrar los resultados finales de su trabajo. Ese es el chaquiricuchina (del quechua chaki rikuchina, "mostrar los pies").

La marcanmama, por su parte, pide ayuda a una cocinera para gestionar la enorme cantidad de comidas
que deberán prepararse y servirse, mientras que el marcantaita reúne gente (mediante el antiguo sistema de ayuda recíproca de la minga) para cortar y acarrear leña para cocinar. La fiesta arranca el día 22 de diciembre con la huacra llushtina (del quechua waqra llust'ina, "desuello del ganado"): la matanza y el desuello de las reses que serán consumidas durante el festejo. Además, ese día se alzan castillos (palos/troncos altos, con regalos en la punta) frente a la casa del marcantaita; el número de castillos hablará del prestigio y el poder económico y social del individuo.




El día 23 se realiza el cullqui juntana (del quechua/castellano qullqi juntana, "juntar dinero"): los asistentes a las fiestas contribuyen con dinero a voluntad, y reciben atenciones proporcionales a sus donativos. Por otra parte, por la tarde la efigie del Niño Jesús es llevada en procesión desde la iglesia a la casa del marcantaita, en donde se bailará y se compartirá abundante chicha de jora y un plato especial conocido como uchu mate (una fuente grande con arroz o papas, cuy o pollo asado, pan y queso).
El día 24, la efigie del Niño Jesús vuelve a la iglesia para la misa de Nochebuena. Mientras tanto, se acercan vecinos de otras comunidades a la casa del marcantaita para recibir miel y sopa. Es característica la miel de panela (melaza de caña), repartida con pan y quesillo. A la vez, las mujeres de los juguetes llevan obligaciones (tradicionalmente, ocho huevos duros) a los marcantaitas.

El día 25 se baila frente a la iglesia, y continúa la fiesta y las visitas de vecinos y familiares, quienes son atendidos con comida y bebida. Allí se acaba la fiesta pública. Al día siguiente, 26 de diciembre, la celebración es privada. El marcantaita y sus ayudantes, sus familiares y amigos, los músicos y los juguetes realizan el cunzhu: se reparten los castillos y se consumen y reparten todos los restos de comida.

Quizás los personajes más atractivos y mejor conocidos de la Navidad Saraguro sean los huahuas o juguetes: bailarines disfrazados, de ambos sexos y todas las edades. Son los ajas, los huiquis, los animales y sus paileros, y los sarahuis.
Los ajas o diablicos exhiben una larga y característica cabellera de musgos secos sujeta a un par de cuernos de venado previamente atados a un sombrero. Llevan además una máscara de piel de oveja o de tela, y un látigo. Los wikis (huiquis) o monos llevan un traje multicolor, una máscara de tela y un muñequito que los representa en la mano, y son personajes pícaros. Los animales son el oso y el león, cada uno con su disfraz (a veces realizados con pieles de oveja); sus correspondientes paileros son personajes vestidos como un mestizo, con máscaras con nariz muy larga, sombrero de paja y un tamborcito con el que hacen bailar a sus respectivos animales.

Finalmente, los sarahuis llevan trajes de colores vivos; las mujeres (huarmi sarahuis) visten pollera azul, muchos pañuelos, varios collares y un tocado de cintas y adornos muy elaborado, llamado balaca (es el traje que se usa, con ligeras modificaciones, para el matrimonio); los varones (cari sarahui) pueden ir portando un gigante (una estructura que imita a una figura humana) o vestidos de jíbaros, con pantalones rojos, caretas y guirnaldas de plumas.

La fiesta de Navidad es complementada, días más tarde, con la Fiesta de los Tres Reyes, durante la cual se realiza otro desfile con personajes similares.

Fuente: Tierra de Vientos (Num. 17) - Edgardo Civallero



DONACIONES
Ecuador del Sur




Vertientes de Landapo, ¿agua para todos?